El Hospital Nisa 9 de Octubre realiza dentro de la “prueba del talón” – test de sangre que se le practica al recién nacido dentro de las primeras 48 horas de vida – una prueba especial que permite detectar cardiopatías congénitas.
Al recién nacido se le toma la saturación de oxígeno postductal en el pie, que se llama pulsioximetría, y si alcanza un valor inferior al 95 por ciento, en este hospital se inicia el protocolo de diagnóstico de cardiopatías congénitas.
Esta prueba es muy rápida y el bebé casi no la sufre, razón por la cual en este hospital se aplica por protocolo a todos los bebés recién nacidos.
Estas enfermedades pueden cursarse sin síntomas o con sintomatología poco específica, de allí que sea tan importante detectar y tratar precozmente las cardiopatías.
Hasta ahora, las formas de lidiar con las cardiopatías congénitas es mediante ‘screening’ con ecografía prenatal, la estancia prolongada en el hospital después del parto, dos o más exámenes postnatales durante la primera semana o las siguientes semanas de vida y entrenamiento de los clínicos para detectar cardiopatías congénitas silentes.
Pero la pulsioximetría es un método muy eficaz, más rápido y plausible de aplicarse de forma universal, por ello es defendido como herramienta para darles batalla a las cardiopatías.
-