Un estudio realizado por el doctor Arthur Brennan, de la Universidad londinense de Kingson, reveló que no sólo por cuestiones psicológicas sino también fisiológicas, el hombre puede sentir síntomas del embarazo en sintonía con su mujer, cuando se enteran de que serán papás en unos meses.
Así, muchos hombres experimentan dolores de espalda, cambios en su humor, molestias digestivas, mayor apetito y un consecuente aumento de peso en los primeros meses de la gestación de su futuro hijo.
Estas manifestaciones no son otra cosa que empatía con la situación de la mujer. De los casos estudiados, se determinó que un 55% de los hombres sufrió estos cambios junto a sus parejas. La causante de todo ello podría ser la prolactina, hormona relacionada con la lactancia pero también con otros procesos fisiológicos humanos, en hombres y mujeres.
Así, se supo que cuando un hombre carga a su bebé en brazos, la hormona prolactina aumenta hasta en un 20%. La idea de un nuevo hijo en el embarazo, puede causar también un incremento que se manifiesta de diferentes formas, como las descriptas.
Además, esta hormona es la que provoca apego, tanto de la mujer hacia su nuevo bebé como del hombre hacia su esposa y su nuevo hijo. Una vez más, la sabia naturaleza nos da otra lección.