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domingo, 17 de octubre de 2010

El 60% de los casos de infertilidad se puede resolver sin reproducción asistida

En la actualidad, los casos de dificultades para concebir se han multiplicado. Sin embargo, los especialistas han encontrado que las características de la vida moderna son las responsables de buena parte de estos casos.

En efecto, prestar atención a hábitos saludables de alimentación, deportes, control del estrés y el no consumo de alcohol, tabaco y otras sustancias nocivas, puede revertir muchas veces la infertilidad. De hecho, el 60% de los casos de infertilidad se relacionan con estas causas y se pueden resolver sin recurrir a técnicas de fertilización asistida.

Otro factor clave en el que insisten los médicos: la edad de la madre. Hay que evitar la maternidad luego de los 35 años si se quiere tener más posibilidades de llevar embarazos y partos sin problemas.

Hay que procurar una vuelta a una vida sana y ordenada antes de intentar cualquier otra forma de ayudar a la fertilidad. Comer bien, hacer ejercicios, descansar y bajar el estrés y la ansiedad pueden hacer maravillas en el cuerpo femenino, que logra así revertir problemas de concepción.

El tejido adiposo tiene una relación directa con la fertilidad de la mujer. La obesidad puede jugar una mala pasada, pero es tanto o más nociva una dieta demasiado restringida en grasas y proteínas.

Algunas de las pautas y recomendaciones de nutrición de los médicos en este sentido:

- Los antioxidantes como la vitamina E y el selenio ayudan a mejorar la salud reproductiva, reparando el daño oxidativo causado por la edad y las toxinas del medio ambiente.

- El ácido fólico previene malformaciones congénitas.

- El aminoácido L-arginina contribuye a mejorar la circulación de los órganos reproductivos, lo que favorece el desarrollo del ovocito y la implantación del embrión.

- El vitex, que armoniza naturalmente el balance hormonal y la ovulación normal. El vitex demostró reducir los síntomas premenstruales y otras irregularidades del ciclo.

Los suplementos de antioxidantes demostraron ayudar muchísimo a concebir no sólo de forma natural, sino también complementando un tratamiento de fertilización asistida. Por ello, comer sano es el primer paso para tener un bebé.