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viernes, 13 de julio de 2012

Posparto: el botiquín de la recién mamá

Si estás a punto de dar a luz o acabas de tener a tu bebé, conviene que tengas preparado un botiquín para curar la episiotomía o la cicatriz de la cesárea, hacer frente a los loquios, tratar posibles grietas en el pecho por la lactancia y mantener hidratada tu piel.

Imprecindibles en tu botiquín para después del embarazo:

- Compresas. Los loquios, el sangrado que se produce después del parto, duran entre 15 y 30 días. En la primera semana pueden llegar a ser muy abundantes. Necesitarás compresas tocológicas de algodón, sin plásticos ni superabsorbentes. Hay que cambiar de compresa con frecuencia.
- Braguitas desechables. Imprescindibles en los primeros días de posparto. Existen de papel y de maya, que suelen ser más cómodas porque son más elásticas y resisten varios lavados.
- Jabón neutro. para lavar la zona genital, haya episiotomía o no, lo mejor es usar jabón de glicerina o un jabón de pH neutro. Muchas matronas recomiendan el jabón lagarto de toda la vida, porque tiene un ph muy parecido a la piel.
- Cristalmina. La clorhexidina es el antiséptico más recomendado en el posparto, ya que ya que no se han descrito toxicidad ni contraindicaciones, ni durante el embarazo ni en la lactancia. Los desinfectantes con yodo están desaconsejados, porque pasan a través de la leche y pueden causar problemas de tiroides al bebé, y en las cesáreas dificultan la eliminación de las grapas.
- Gases estériles: para limpiar y secar las cicatrices o zonas irritadas.
- Una buena hidratante, en gel o en crema.

Consejos para curar la episiotomía

- Los puntos de la episiotomía son reabsorbibles, es decir, se caen solos, y tardan en hacerlo aproximadamente 10-15 días.
- La zona genital se ha de lavar solo externamente, y solo con agua templada y jabón de pH neutro.
- Si se infecta la episiotomía o el desgarro o se abren los puntos, la matrona o el tocólogo nos explicarán qué hacer (a veces es necesario tomar antibióticos o practicar curas con antisépticos o cicatrizantes). Cuando los especialistas recomiendan un antiséptico suelen prescribir clorhexidina (como la Cristalmina).
- Hay que lavar y secar la zona siempre de la vagina al ano, para evitar la propagación de gérmenes de la zona rectal, y mejor con la mano, ya que las esponjas acumulan un montón de gérmenes.
- La zona de la episiotomía se lava con agua de chorro, como la de la ducha, nunca con agua estancada, como la del bidé y, salvo que el médico nos diga otra cosa, no se recomienda lavarse más de dos veces al día, porque la humedad dificulta la cicatrización.
- Después del lavado, sécate bien con una toalla suave, o con una gasa estéril, también en dirección de la vagina al recto. No es necesario usar el secador.

Consejos para lavar la herida de la cesárea

- La cicatriz de la cesárea se lava también con agua y jabón neutro y con la mano, ya que la esponja puede engancharse en las grapas. Después, se seca con una gasa estéril (dando pequeños toques, sin arrastrar) y se deja unos minutos al aire. Es preferible no ponerle apósitos, pero la ropa no debe rozar la herida de la cesárea.
- En el hospital pueden aconsejar un antiséptico para curarla, como la clorhexidina, ya que las soluciones con yodo pueden pasar al bebé a través de la leche materna y fijar las grapas a la piel.
- La matrona retira los puntos externos en la consulta, pasados unos 10 días.
- Para que la piel cicatrice correctamente es importante mantenerla hidratada con geles y cremas.

Grietas en el pecho

- Las grietas en el pezón, que pueden surgir al principio de la lactancia, pueden llegar a ser muy dolorosas. El exceso de higiene en el pecho potencia su aparición, por lo que no conviene lavar el pecho entre tomas ni usar demasiadas pomadas o cremas.
- Para curarlas una vez aparecen, lo fundamental es colocar al niño en una posición correcta para mamar, con el pecho bien metido en la boca muy abierta. si tardan en curarse, el médico puede recomendar un antiséptico.