Ser papás es un acontecimiento que claramente cambia la vida. Quizás en la mamá se de como un proceso más natural puesto que el cambio es progresivo, en nueve meses su cuerpo va modificándose para estar preparada para darle al bebé todo lo que necesite. Pero en el caso de los papás, la situación es más compleja. Ellos no sufren esos cambios, por lo que de un día para el otro sienten que sus vidas, su rutina y por sobre todo la relación con su pareja ha cambiado.
Hoy me voy a concentrar especialmente en el miedo de que el bebé se transforme en el centro de sus vidas.
Suele pasar que en los primeros meses de vida del bebé, éste ocupe todo el tiempo de la mamá. Pasará noches sin dormir, deberá alimentarlo, ciudarlo, dormirlo. Lo que seguramente haga que su única preocupación sea el bienestar de su bebé, además de estar sumamente cansada en los momentos en que el bebé duerme.
Es por esto que su pareja puede comenzar a sentirse relegado de ese trío que se ha formado, y pase a sentir que ocupa un lugar secundario en los sentimientos de su pareja. Para que esto no llegue a convertirse en celos injustificados, es preciso que se tomen medidas para que la pareja pueda tener sus tiempos y ninguno de los dos sienta que su relación cambió rotundamente ante la llegada del bebé.
El consejo primordial es fortalecer la comunicación de la pareja. Es comprensible que ambos estén más cansados y deban realizar más tareas en el hogar, además de ir a trabajar en el caso del hombre, para sostener a la familia. Esto reduce los tiempos en que la pareja pueda estar sola como antes. Y puede llevar a molestias y generarse recriminaciones que si no se hablan en su debido momento no llevarán más que a un distanciamiento de la pareja.
Una buena solución es tomarse media hora cada día una vez que el niño logró dormirse, para hablar ambos de sus sentimientos, de lo que les sucedió en el día, o de lo que sienten hacia el otro a partir de la llegada del nuevo integrante de la familia.
También es importante que les pidan a amigos, familiares, o alguna baby sister que cuiden al bebé alguna noche. Aprovechen esto para salir, ir a comer, al cine, a pasear, para volver a hacer aquello que acostumbraban a hacer antes de ser padres. En el caso de que no quieran dejar al recién nacido solo, una buena opción es preparar una cena especial para cuando el niño haya conciliado el sueño, con toques románticos que aviven la pasión que quizás esté algo interrumpida.
Otro punto importante en la relación de la pareja es halagarse mutuamente, no olviden que la mamá luego de haber pasado nueve meses subiendo de peso, no se sentirá la mujer sensual de antes. Es por esto importante que se preocupe por seguir luciendo bella y que su pareja lo reconozca.
Via: zonabebes
-
lunes, 22 de junio de 2009
Miedo a que el bebé sea el centro de sus vidas: consejos para la pareja
Etiquetas: FAMILIA