Si eres como la mayoría de los padres con hijos en edad escolar, sabrás que llevarlos a la cama es imposible. Los llevas a dormir a las 8:30, les lees un cuentito, les deseas buenas noches y anhelas poder ponerte a tiro con tus cosas. Disfrutar de unas horas tranquilas con tu pareja, algunos mimos y arrumacos y por qué no, descansar.
Sin embargo, nunca pasa eso. Te pasas el resto de la noche entrando y saliendo del cuarto de tu hijo, que no quiere, y no quiere, y no quiere dormir. Hasta que por ahí… tres horas después, el pequeño se rinde y se duerme.
La hora de dormir puede ser conflictiva para un niño de edad preescolar. ¿Por qué? Por un lado, porque que él está aprendiendo a afirmarse y disfrutar de su nueva independencia.
Por otro lado, porque está temeroso de lo que significa quedarse solo y por su cuenta. La lucha contra el sueño es una manera de tomar el control, pero además, es una forma de esquivar los temores que el niño tiene a la noche.
¿No recuerdan cuando eran niños? ¿Se acuerdan de los monstruos debajo de la cama, los “cucos” del armario, las tormentas tenebrosas, los insectos? ¡Ahhhh! ¡Vieron! Ya se acordaron… se acordaron del miedo que daba ser niño.
Daba miedo estar solo en la oscuridad. Entonces… hagamos dos cosas: recordemos que daba miedo y seamos comprensivos. Y además, pongamos en práctica técnicas para que la batalla de ir a dormir sea menos combativa.
Via: zonabebes
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martes, 8 de septiembre de 2009
¿Por qué los niños se resisten a dormir durante la edad preescolar?
Etiquetas: NIÑOS