Hasta hace algunos años era común que los niños tomaran aspirina o aspirinetas cuando estaban resfriados o con malestar general. Sin embargo, actualmente, todos los médicos coinciden en que las aspirinas están prohibidas en los niños.
A pesar de este concenso entre los médicos, hay padres que aún automedican a sus hijos y lo hacen con aspirinetas, creyendo que les hacen un bien al niño.
Resulta que la aspirina además de como analgésico actúa como antiagregante plaquetario, y en los niños se corre el riesgo de que se provoquen hemorragias. Además, las aspirinas pueden empeorar cuadros eruptivos como la varicela o el sarampión debido a su alto contenido de ácido acetilsalicílico.
Estas son algunas razones por la que los niños menores de 15 años no deben consumir aspirinas bajo ningún concepto. Actualmente, para bajar la fiebre o aliviar resfríos se utilizan otras medicinas como por ejemplo el paracetamol.
Así que ya sabes, quita del botiquín infantil las aspirinetas.