En el libro ‘Meditación para el embarazo’, su autora Akasha Kaur, maestra de yoga prenatal, aconseja a las parejas no dar la noticia del embarazo hasta pasados los primeros cuatro meses. ¿Qué te parece la idea de esperar 120 días para anunciar el embarazo?
Apela a la cautela y a la paciencia para vivir la primera etapa del embarazo en la intimidad de la pareja, sin presiones emocionales del resto de la familia y amistades.
Hay una realidad, que es que muchos embarazos acaban en pérdida, se cree que uno de cada tres, por lo que hay parejas que prefieren esperar un tiempo prudencial hasta asegurarse que todo marcha bien.
Por el contrario, hay otras que prefieren compartir su felicidad con familiares y amigos desde el primer momento. Desde luego, es una decisión personal que depende de muchos factores como la propia personalidad, y desde luego, el momento que uno esté viviendo.
Volviendo a por qué esperar 120 días para comunicar socialmente la noticia del embarazo, en el libro se da una justificación trascendental:
“En el día 120, la mujer es honrada con la llegada del alma de su hijo, ya que durante los primeros cuatro meses, el bebé se ha ido formando, creciendo, madurando poco a poco para que llegado el momento, esté completamente listo para recibir su alma”.
Durante estos primeros días de la gestación, las hormonas aceleradas están vibrando en todo tu ser, modificando tu cuerpo, tu mente y tus emociones y se convierte en la etapa más importante del embarazo, ya que de la vibración en la que vibras depende el alma que atraerás.
Como digo antes, creo que depende de cada uno y del momento por el que esté atravesando. Yo he anunciado mi primer embarazo con toda la ilusión y a las pocas semanas tuve un aborto espontáneo. ¿Debería haber esperado más tiempo? Puede, pero era mi primer embarazo, estaba muy ilusionada y quise compartirlo con la familia más cercana. También me gustó tener su apoyo cuando ocurrió la pérdida, hay parejas que prefieren vivir el duelo en la intimidad y es absolutamente respetable.
De hecho, cuando volví a quedar embarazada y los siguientes dos embarazos, dada mi experiencia anterior, sólo se lo comuniqué a mi madre y a mi hermana (y mi marido por supuesto). Al resto, recién pasadas las primeras 12 semanas. Y no tanto por el resto, sino por mis hijas, porque eran muy pequeñas para comprender que ya no nacería el hermanito que esperábamos.