Hoy te contamos todo lo que necesitas saber acerca de una buena hidratación, porque es fundamental durante y después del embarazo. ¿Sabías que todas las bebidas hidratan y no sólo el agua?
Todas las personas deberían consumir entre dos litros y dos litros y medio de líquido, la mayoría aún piensan que sólo el agua puede ayudarles a estar hidratados por lo que no llegan a esta recomendación ya que se cansan de tanta agua.
Pero, ¿Y si tuviéramos en consideración que otros líquidos también hidratan? Probablemente, si varías el sabor de los líquidos que consumes te será mucho más fácil su ingesta.
Para las mujeres embarazadas es fundamental llegar a esta cantidad de líquidos ya que les ayuda a hacer frente a los cambios corporales que se producen durante estos meses.
Para aquellas madres que están en el periodo de lactancia, la ingesta de líquidos es imprescindible para la producción correcta de leche materna.
Durante el II Congreso de Hidratación Nacional se abordó toda la problemática que entraña la deshidratación, centrándose en la deshidratación leve, una deshidratación del 2%.
Las consecuencias inmediatas de la deshidratación es un rendimiento bajo, dificultad de atención y de memoria. De igual manera, las consecuencias posteriores serían problemas de concentración, sensación de cansancio y fatiga y, somnolencia.
Las personas mayores también necesitan una buena hidratación porque no tienen la misma cantidad de agua en el cuerpo, además la sensación de sed está mucho más disminuida por lo que no ingieren tanto líquido como deberían.
Uno de los trucos que se puede mantener es llevar siempre una botella allá donde vayas para que al final ingieras los líquidos necesarios. Y además, si vas ingiriendo diferentes líquidos a lo largo del día, te costará menos llegar a los dos litros diarios!
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