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lunes, 21 de mayo de 2012

¿Puedo darme rayos UVA estando embarazada?

¿Son dañinos los rayos UVA? ¿Y los autobronceadores? Durante el embarazo queremos estar guapas, pero también nos preocupa nuestro bebé. Si estás pensado en darte Rayos UVA, toma nota de nuestras recomendaciones.

¿Cómo funciona nuestra piel?

Los rayos ultravioleta A naturales son necesarios para sintetizar la vitamina D, por ello se les ha llamado también rayos antirraquíticos.

En respuesta a la radiación ultravioleta, la actividad de los melanocitos de la piel aumenta, dando lugar a un incremento de la pigmentación de la piel (color moreno).

¿Puedo darme rayos UVA en el embarazo?

No hay evidencias de que los rayos UVA puedan aumentar la frecuencia de abortos espontáneos o de malformaciones congénitas en el bebé.

Pero los estudios son escasos y los datos tampoco son suficientes para afirmar que tomar rayos UVA no provoca efectos adversos para la gestación.

Aunque se sospecha que el riesgo, en el caso de existir, sería muy bajo y por un tiempo de exposición largo, no podemos olvidar que los rayos UVA producen mutaciones y cáncer y alteran ciertos intercambios cromosómicos en los animales de experimentación.

Por esta razón no se puede descartar que pudieran ser un factor de riesgo para el bebé.

Se usa para eliminar la psoriasis

La exposición a rayos UVA se utiliza para tratar ciertas enfermedades de la piel, como, por ejemplo, la psoriasis.

Ésta, debido probablemente al aumento de progesterona, puede presentarse durante el embarazo. Pero dado que no se ha confirmado la inocuidad de los rayos UVA, se teme que puedan perjudicar al bebé.

La ausencia de estudios es aún mayor en el uso de los rayos UVA para el bronceado de la piel, sobre todo en exposiciones amplias (en las camas de rayos UVA) y prolongadas.

Pueden aparecer manchas en la piel

Por otro lado, estas exposiciones, durante el embarazo, aumentan las manchas de la piel conocidas como cloasma gravídico.

Nuestro consejo es que se eviten los rayos UVA durante el embarazo, siempre que no sean necesarios.

Si hubieran de utilizarse, deben reducirse las dosis y el tiempo de exposición.

Tampoco existen estudios sobre autobronceadores, por lo que se desconoce su efecto en el desarrollo del embarazo.