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viernes, 13 de febrero de 2009

¿Se puede saber la fecha exacta del parto?

Existen diferentes técnicas para calcular con cierta precisión cuando llegará al mundo el pequeño.

La creencia de que algunos niños eligen una fecha especial para venir al mundo no es un hecho constatado, aunque nadie pone en duda que la psique influye en las funciones del cuerpo y, por tanto, también en el parto. Cuando la mujer acude a la consulta del ginecólogo tras descubrir que está embarazada, lo primero que hace éste es determinar la fecha probable del parto mediante diversos medios fiables.

¿Cuánto dura el embarazo?

Se calcula que el embarazo dura unos 280 días, contados a partir del primer día de la última menstruación, aunque se considera totalmente normal que el parto se produzca en un margen de tres semanas antes o dos después de la fecha prevista. Para intentar precisar más, la gestación ya no se mide en meses, sino en semanas de amenorrea (ausencia de menstruación).

Solo el 50-60 por ciento de las mujeres dan a luz más o menos en la fecha probable y el que esto suceda depende de diversos factores.

La ecografía y el día de la ovulación

Además de confirmar el embarazo en una fase muy temprana, la ecografía permite averiguar la fecha de ovulación. El criterio más preciso es la llamada ecografía precoz (a las 7-8 semanas de gestación); mide la longitud cabeza-nalgas del embrión, ya que señala la fecha en que se produjo la fecundación con cuatro días de margen. Esta prueba es aconsejable si la mujer no recuerda con exactitud cuándo tuvo su último período o si tiene ciclos menstruales irregulares.

De no plantearse estas dudas, será suficiente con realizar la primera ecografía en torno a las 12 semanas de embarazo, cuando ya ha finalizado la formación del embrión y este se puede visualizar globalmente. Midiendo la distancia que media entre la coronilla y la rabadilla se estima la edad gestacional y el momento del parto. La fecha obtenida puede tener una desviación de una semana.

Causas que condicionan el inicio del parto

Aunque no se conocen con exactitud los mecanismos que provocan el inicio del parto, se barajan algunos factores que pueden influir, tanto maternos como fetales.

1. Hormonas

Incluso en el útero, cada bebé sigue su propio ritmo de maduración. Algunas teorías argumentan que el propio feto, cuando se siente listo para nacer, pone en marcha el parto mediante la liberación de una serie de hormonas en la hipófisis (las prostaglandinas y la oxitocina fetal) y las glándulas suprarrenales (el cortisol) que inician las contracciones.

También se cree que los cambios hormonales de la mujer influyen en el desencadenamiento del parto. La progesterona, una hormona relajante de la fibra muscular lisa, y por tanto protectora durante el embarazo, deja de producirse llegado el momento del parto, a la vez que aumentan los estrógenos, que sensibilizan la fibra muscular uterina y provocan contracciones.

2. Emociones

* Las situaciones de estrés, nerviosismo o una noticia inesperada pueden adelantar el parto, aunque no es habitual que esto ocurra.
* El ciclo menstrual de la mujer es muy complejo. De igual forma que en unas mujeres el estrés puede provocar la retirada de la regla, en otras desencadena una ovulación.

3. Genética

La herencia genética puede hacer que madres, hijas o hermanas tengan ciclos menstruales similares (igual de cortos o largos). Por eso se suele decir "a mi madre se le retrasó el parto una semana y a mí también". La experiencia materna no influye en la duración del parto, pero sí puede hacerlo en la del embarazo, porque las reglas de madre e hija son similares.

Lo que sí se sabe es que el embarazo de las mujeres de raza negra dura una semana menos y que las niñas permanecen un día más en el vientre materno que los niños. La genética seguramente tiene aquí mucho que ver.

4. Fases de la luna

No existe base científica para asegurar que la luna influya en el momento del parto, aunque sí hay una creencia extendida (incluso entre matronas y ginecólogos) de que se produce un mayor número de nacimientos entre el último cuarto de luna nueva y, sobre todo, en luna llena.

Lo que no puede negarse es que las fases lunares están muy ligadas al ciclo de la mujer. Cada ciclo o mes lunar dura cuatro semanas, lo mismo que un ciclo menstrual, y el embarazo diez meses lunares.

Por mucho que se piense en el parto, este se producirá en su momento, y no sirve de nada atormentarse con la cuestión. La madre debe concentrarse en disfrutar de su embarazo, esperar tranquilamente a que se desencadene el feliz acontecimiento, que, tarde o temprano llegará, sabiendo que todo está controlado.

¿Por qué se adelanta?

Un 10 por ciento de las mujeres dan a luz antes de la semana 37. Los expertos no siempre saben explicar el porqué, aunque piensan que el parto puede adelantarse cuando la embarazada padece algún factor de riesgo como:

* Haber sufrido algún aborto u otro parto prematuro.
* Tener un ritmo de vida muy estresado.
* O un trabajo que la obligue a permanecer muchas horas de pie.

Los fetos con retraso en el crecimiento suelen nacer también prematuramente.

La regla de Naegele

Se suman siete días al primer día de la última regla y luego se restan tres meses. Por ejempo, si una mujer tuvo su último periodo el 11 de agosto, saldrá de cuentas el 18 de mayo del año siguiente. Se llama así por el ginecólogo que lo inventó.

La mayoría de los ginecólogos utilizan también un disco formado por dos cartones: uno con los meses del año y otro con las semanas del embarazo. Señalando el primer día de la última regla, buscan el día y mes que corresponde a la semana 40.